Además de ser una estación transitoria en la que los días se oscurecen más rápido, el otoño trae consigo alimentos ricos en nutrientes y vitaminas, que proporcionan a nuestros menús una gama de sabores frescos, ideales para combatir los efectos del cambio climático.
Una realidad es que independientemente de la fecha, podemos encontrar gran variedad de frutas, verduras y hortalizas en los supermercados. Sin embargo, los alimentos de temporada fortalecen nuestra salud.
Cuáles son los mejores alimentos otoñales
El nivel nutricional, vitamínico y mineral de los alimentos de temporada, en este caso del otoño, acarrean mayores efectos positivos en nuestra salud, ya que se encuentran en su momento ideal. Debido a que se pueden consumir en distintas presentaciones, como plato fuerte o de merienda. Es por ello que a continuación mencionaremos los mejores alimentos del otoño:
1. Verduras y hortalizas.
Durante el otoño podremos disfrutar de verduras u hortalizas como las alcachofas, coliflor, calabazas, espinacas y pimientos. Los cuales son una gran fuente de vitamina C, fitonutrientes y antioxidantes que fortalecen el sistema inmunológico. Además, hay cosechas de betacaroteno, berenjena y brócoli, ricos en potasio. Algunos de estos alimentos combaten el colesterol, como el brócoli.
2. Frutas y frutos secos.
El otoño es la época de las manzanas, una excelente fuente de vitaminas y antioxidantes. Los higos también aparecen en estas fechas, y destacan por aportar vitamina B, minerales, hierro y calcio, beneficios que nos dan energías en nuestras actividades diarias. En sus presentaciones blancas y negras, la uva es rica en azúcares naturales, vitamina B6 y ácido fólico.
Para hacer contraste, aparecen los frutos cítricos como las granadas, que aportan componentes antioxidantes, los cuales reducen el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares o cáncer. Entre los frutos secos se pueden mencionar las nueces, almendras y las castañas, estas últimas son las menos calóricas.
3. Setas
Las setas enriquecen nuestro paladar debido a sus sabores campestres y suaves texturas. Además nos proporcionan minerales, oligoelementos y micronutrientes como el fósforo, hierro y vitamina B. Debido a su bajo porcentaje de calorías, pueden consumirse en los platos principales. Con este artículo de Nut and Health esperamos que en otoño tus comidas tengan más variedad en colores, sabores, vitaminas y nutrientes.